An der schönen blauen Donau
Portada de la partitura, 1867 |
Compositor: Johann Strauss, hijo
Fecha
de la composición: 1867
Estrenada
el 13
de febrero de 1867
El más famoso de los valses vieneses
La
número 4 en la lista de obras de música clásica es el vals por excelencia, el
que todo el mundo conoce: el Danubio azul o el bello Danubio azul.
Empezó
como una obra coral, sin demasiado éxito. Pero luego se interpretó en la
exposición Universal de París y al público le encantó la alegría, la ligereza,
el buen humor y la ensoñación romántica que transmite esta pieza.
Pronto
se divulgó por toda Europa, incluyendo seis conciertos del autor en el Covent
Garden, invitado por el Príncipe de Gales.
Hoy en día es muy habitual en bodas, y como cierre de los Conciertos de Año
Nuevo, junto con la Marcha Radetzky.
Lo que más me gusta de los valses, así, en general, es que dentro de lo que
son los bailes de salón, los pasos básicos resultan de lo más facilito y resultón.¿Que no lo habéis probado nunca? Pues ya estáis tardando...
Para
saber más, la wikipedia. En
YouTube puedes encontrar infinitas representaciones de esta obra, pero yo optaré por mi apreciado
Daniel Barenboim dirigiendo a la Filarmónica de Viena en el concierto de año nuevo de 2014,
con baile incluido de una pareja muy elegante... al estilo centroeuropeo, claro.
Como es una pieza tan popular, hay montones de grabaciones de ella,
especialmente en las de conciertos de año nuevo. Por poner una que agrada fijo,
tenemos el ‘1987 New Year Concert in Vienna’ de Deutsche Grammophon con Karajan
dirigiendo a la Filarmónica de Viena y la intervención de Kathleen Battle en Frühlingsstimmen (Voces de primavera). Es
una roseta en la Guía Penguin y dicen que El
Danubio azul nunca se ha interpretado de manera tan seductora en disco.