domingo, 23 de mayo de 2021

#36 Fidelio

 

Noah Baetge como Florestan en una representación
de Fidelio en el festival de Princeton (2017)
Autor: A hungate
[CC BY 4.0], vía Wikimedia Commons

Fidelio oder die eheliche Liebe, Op. 72


 

 


 

 

 

Estreno: Viena, 23 de mayo de 1814 (versión definitiva)

Compositor: Ludwig van Beethoven

Libretistas: J. Sonnleithner, S. von Breuning y G. F. Treitschke, basado en el libreto de J. N. Bouilly, Léonore ou L’amour conjugal

Género: singspiel en dos actos

 

Tal día como hoy, del año 1814, se estrenó en el Teatro de la Puerta Carintia (Kärntnertortheater) de Viena, la versión definitiva de la única ópera de Beethoven.

 

20 de noviembre, 1805, los ejércitos napoléonicos acaban de ocupar Viena.

La soldadesca se larga al Theater an der Wien, que estrenan ópera. Media ciudad ha huido de la capital habsburgo, ocupada por un ejército extranjero, así que podéis imaginaros la situación.

La mayor parte del público, pues, estaba formada por oficiales franceses. Ya os podéis imaginar el escaso entusiasmo que sintieron por una ópera que era en tres actos, cantada en alemán y un estilo tan diferente al francés. No, la única ópera de Beethoven no empezaba con buen pie.

Reconozco que a mí Beethoven me suele dejar un poquito fría. Le asocio demasiado a un tipo serio que lucha con la composición para lograr ese altísimo nivel, algo alejado de la aparente facilidad de un Mozart.

El teatro no fue lo suyo, pero le bastó la magnífica Fidelio para entrar en el repertorio. Eso sí, su lucha con la partitura fue constante y le llevó años. Estrenó hasta tres versiones: el 20 de noviembre de 1805, el 29 de marzo de 1806 y el 23 de mayo de 1814. Todas ellas en Viena, las dos primeras en el Theater an der Wien, y la última, en el Kärntnertortheater.

Es una ópera de esas que se llamaban «de rescate», en que se produce el heroico rescate de una persona injustamente apresada. Al parecer, A Beethoven, de joven, le gustó Lodoïska, de Luigi Cherubini.

Se ambienta (es un decir) en la Sevilla del siglo XVI, en una prisión. Fidelio, el joven ayudante del carcelero y amado de la hija de éste es, en realidad, Leonora. Su marido, Florestan, está prisionero, en el calabozo más remoto por un mal mesturero, como quien dice. La intervención de un ministro del rey consigue el final feliz para los esposos y el castigo del malvado.

Desde el punto de vista dramático, es una historia que simplemente, se lleva, se deja ver. Si la ves en el teatro, no te vas a aburrir. Y es una buena opción para quienes empiezan en esto de la ópera, es poco más de dos horas.

Destacaría del argumento la fuerza de Leonora como la leal esposa que lucha por su marido. Florestan, el prisionero, la verdad es que aparece poco en escena y a su lado palidece bastante. Hasta el otro personaje femenino, Marcelina, tiene cierto empaque, aunque no estoy segura si pretendía que fuera algo cómico, a mí me da penuca, la pobre.

Y como todas esas óperas que tienen papeles con calzones, está el morbo de ver una mujer travestida, que como siempre en teatro, hay cantantes que lo logran mejor y otras peor.

Ahora, lo sobresaliente de la esta ópera, desde luego, es la música. Maravillosa, con momentos sublimes, como ese cuarteto en el primer acto que empieza como un aria, luego un dúo, pasa a un trío y acaba siendo un cuarteto que a mí se me da un aire mozartiano.

A pesar de ello, Beethoven es más de música sinfónica que vocal. De hecho, se ha llegado a calificar Fidelio como «ópera sinfónica». Es una de esas óperas de las que se dice que «exige los mejores cantantes del mundo», por varias razones: el altísimo nivel de la partitura, la potencia que exige muchas veces cantar junto a una orquesta alemana a tope (es lo que tenía Beethoven, que usaba la voz como un instrumento más) y finalmente tienen que ser actores razonablemente buenos, pues hay partes habladas.

Si la ópera, así, en general, le exigió tres versiones hasta darse por satisfecho, de la obertura hizo hasta cuatro. Una de ellas, la llamada «Leonora 3», compuesta para las representaciones de 1806, se representa a veces de forma separada, como una pieza sinfónica dramática. La actual viene de la versión definitiva, la de 1814. 

Mi momento favorito de esta ópera ya lo he comentado, el cuarteto «Mir ist so wunderbar» (Para mí todo es tan maravilloso), empieza Marzelline (soprano), le sigue Leonora disfrazada de chico joven (soprano dramática), y a este dúo de voces femeninas se le suma entonces el carcelero Rocco (bajo), y remata la jugada su ayudante Jaquino (tenor ligero). Una maravilla.


     El fragmento de esta ópera que más veces verás citado será el coro de los prisioneros que ha conseguido que los dejen salir al patio de la cárcel: «O welche Lust» (Ah, qué placer), que suena como un coral luterano, o una misa, algo muy sagrado, aunque hable más de la libertad que de ningún sentimiento religioso. 

También destaca el aria de Florestan con el que comienza el segundo acto «Gott! Welch’ Dunkel hier! » (¡Oh, Dios! ¡Qué oscuridad hay aquí!)

¿Qué grabación proponer de esta ópera? Una alemana, sin duda. Sugiero la de Klemperer de 1962 para la EMI, con Christa Ludwig (Leonore), Jon Vickers (Florestan), Walter Berry (Pizarro), Gottlob Frick (Rocco), Ingeborg Hallstein (Marzelline) y Gerhard Unger (Jacquino), coro y orquesta Philharmonia.

 Para saber más, la Wikipedia. El libreto, en español y alemán, así como discografía de referencia, en Kareol

En You Tube he encontrado esta representación de hace años, subtitulada en español

 


jueves, 20 de mayo de 2021

Día #127

 

Aquí, sigo.


 

Hoy «Iron Man 3» (2013). Mñé, demasiada Paltrow en escena, para mi (dis)gusto.

 

Pero hace un par de días visioné «Marvel: Los vengadores» (2012), que hasta la fecha es la que más me ha gustado. Tiene algunas líneas verdaderamente ingeniosas. ¿Buenos guionistas, o morcillas que se le ocurren a Robert Downey Jr? Como el personaje es tan descarado, creo que puede decir cualquier cosa desatada, algo que no podrías poner en boca de otro personaje.

 

Thor: Do not touch me again!

 

Tony Stark: Then don't take my stuff.

 

Thor: You have no idea what you are dealing with.

 

Tony Stark: Uh, Shakespeare in The Park? Doth mother know you weareth her drapes?

 

Thor: This is beyond you, metal man. Loki will face Asgardian justice.

 

Tony Stark: He gives up the Cube, he's all yours. Until then, stay out of the way, tourist.

 

No me imagino al Capitán América burlándose de esa manera.

lunes, 17 de mayo de 2021

Día #124


 

Hoy me ha tocado «Thor» (2011), en mi repaso Marvel… Dirigida por Kenneth Brannagh y con música de Patrick Doyle, ¿hay quien de más?



 

Una estupenda película de héroes con actores de tronío, como Anthony Hopkins, o Stellan Skarsgård. 


Cuesta pensar que en aquel momento, Hemsworth y Hiddleston fuesen unos desconocidos y que se arriesgaron al contratarlos. No me puedo imaginar a Thor, sobre todo, a Loki con otros rostros.

 

Y esas voces masculinas, ains, tan graves, de esas que abrigan más que una manta zamorana.

 

Oh. My. God – dice Jane.

 

My feelings, exactly.

 

Qué pena lo sosa que acaba siendo Natalie Portman. Tiene más salero Kat Dennings en una mirada que Natalie en toda la película.

domingo, 16 de mayo de 2021

#50 El Señor de los anillos: La comunidad del anillo

 


The Lord of the Rings: The fellowship of the ring

Año: 2001

País: Nueva Zelanda

Dirección: Peter Jackson

Música: Howard Shore

 

Frikis del mundo, unámonos

 

Para elaborar este comentario, he aprovechado para ver La comunidad del anillo por enésima vez, esta vez aprovechando la versión extendida en MoviStar +.

El neozelandés Peter Jackson dirigió tres películas, una por cada una de las novelas de El señor de los anillos. Por lo tanto, no es esta primera película autoconclusiva, aunque tiene un cierre de primer acto muy bueno.

Ya sabéis, en este mundo de fantasía épica hay un anillo de poder que domina a todos los demás, y ha ido a parar a las manos de Frodo, un hobbit, criatura sencilla donde las haya, que gustan de los amigos y la buena vida. Les tengo mucho cariño yo a los hobbits, tal vez porque a mí me lo llaman, por ser la más bajita de la casa y además desayunar dos veces (es lo que tiene ser funcionario).

En este mundo de hombres, enanos, elfos y magos, los hobbits son gentes poco inclinadas a la épica, y sin embargo, les tocará arrimar el hombro frente a las fuerzas del mal, y lo asumen con naturalidad, poniendo lo mejor de ellos mismos.

Como de los libros ya hablé aquí, no me voy a extender en explicar de qué va la historia, solo comentaré algo de la adaptación cinematográfica.

Una historia de fantasía épica exige que mucho momento bigger than life, y el director Peter Jackson lo consiguió gracias a los espectaculares paisajes neozelandeses, un casting excelente, una partitura inspirada... O sea qué os voy a contar que no sepáis. 

Para estas cosas hay que saber buscar a actores buenos de verdad, que no le hagan ascos a una historia mítica e interpreten de manera muy creíble a estas criaturas imaginarias. Yo destacaría a Ian McKellen, por supuesto, como el formidable Gandalf, así como a mi admirado Sean Bean, pobrecico qué mala suerte tiene siempre, lo que me gusta a mí este actor y siempre le tienen que poner en plan trágico…

Como tengo debilidad por el personaje de Sam, leal, constante, un tipo fiel que en ningún momento duda de cuál es su papel en la historia y a quien el anillo no tienta lo más mínimo, he de mencionar a Sean Austin, que le pone la cara perfecta.

De las mujeres, me quedo con la superlativa Cate Blanchett y su breve aparición como Galadriel. No puedes dejar de mirarla: la cara, los ademanes, la forma de hablar y caminar,... todo te deja, simplemente, encandilada.

Con todo, yo me quedo con el paisaje montañoso de Nueva Zelanda, los personajes recorren incansables llanuras, pedregales y montañas nevadas.

En mi opinión, es uno de los mejores ejemplos de lo que es una novela adaptada al cine. He leído críticas de algún fan de Tolkien reprochando que se aparte de esto o aquello. Mi perspectiva es otra. Una película basada en una novela, o en una obra de teatro, o un cómic, no es una ilustración del libro.

No, en realidad es la misma historia contada de otra manera, cinematográfica, aprovechando movimientos de cámara, encuadres, personas que ponen sus rostros y sus emociones, la música, las diferentes voces,…. 

En fin, la maravilla que es el cine al servicio de la historia, no del libro.

Esto exige, muchas veces, quitar escenas o personajes y alargar otros o resumir determinadas conversaciones. Todo al servicio de que la película funcione como película. En mi opinión, Peter Jackson lo logró con creces, mostrándonos una historia épica, con personajes queridos, una música que se te queda en la cabeza y frases inolvidables, y no, no solo para hacer memes como Run you fools!

¿Mi favorita? Esta, por supuesto:

Frodo: “I wish it need not have happened in my time”.

Gandalf: “So do I. And so do all who live to see such times. But that is not for them to decide. All we have to decide is what to do with the time that is given us.”

La idea básica es que no podemos escoger el tiempo en el que vivir, todo lo que tenemos que decidir es qué hacer con el tiempo que se nos da.

Y como este es mi blog, os lo pongo



Como proyecto cinematográfico, resulta impresionante. Las tres películas se fueron grabando al mismo tiempo, en un rodaje exigente en el que más de un actor acabó lesionado. Llevó años… el rodaje en sí fue, según compruebo en la Wikipedia, desde octubre de 1999 hasta diciembre de 2000. Pero luego cada peli llevó una posproducción de un año.

Hubo muchos efectos especiales que hacen más real toda esta fantasía. No habría podido hacerse antes, o no de esta manera. En esto también me parece ejemplar, con los efectos al servicio de la historia, y no al revés. Pero también es bueno que se tiró de lo de toda la vida como un maquillaje soberbio, el recurso a dobles especialistas, y paisajes reales.

Una película tan excepcionalmente buena estuvo bastante nominada y premiada, así que solo mencionaré algunos. En los Óscar consiguió cuatro: fotografía, banda sonora, efectos visuales y maquillaje. Ganó cuatro premios BAFTA, incluyendo mejor película y director. Como secundario, McKellen tuvo el precio Saturn y también el del Sindicato de Actores (SAG).

No diría que es de mis pelis favoritas, pero sí de esas tan agradables de ver que nunca te cansas, y aunque empieces diciendo que solo vas a ver un poco,… al final acabas viéndola entera.

Para saber más: consúltese la Wikipedia, Film Affinity, o la Internet Movie Data Base.

sábado, 15 de mayo de 2021

Día #122

 


 

Por supuesto, cuando me hacen una lista, no lo puedo resistir. 


Hoy me tocaba la tercera de la lista, «Iron Man» (2008), un gusto como siempre ver a Downey Jr. en plan canalla.


Hace años, Paltrow me caía bien. Desde que vende maguferías, no la trago, y no soy capaz de separar la actriz del personaje.


viernes, 14 de mayo de 2021

Día #121

 


 

Viendo las pelis de Marvel en orden cronológico interno. 


Ayer, «Capitán América: El primer vengador» (2011). Hoy «Capitana Marvel» (2019)

 

Tiene razón J, te crees totalmente a Maria y Carol como pareja.


lunes, 10 de mayo de 2021

Día #117

 



 

«Complete Trio Sonatas» del barroco alemán Philipp Heinrich Erlebach, grabación que hicieron en 2019 L'Achéron y Francois Joubert-Caillet.

 

François Joubert-Caillet, parisino del 82, es un violagambista, fundador del conjunto L'Achéron, especializado en la música antigua.

viernes, 7 de mayo de 2021

Día #114

 



 

 

«Gershwin: Piano duets», álbum que, según Spotify, es de 2010.

 

Las hermanas Labèque sisters, Katia (n. 1950) y Marielle (n. 1952), son un dúo de pianistas francesas nacidas en Bayona (en el País Vasco francés): Creo que es el dúo para piano más famoso que hay en la música clásica.

 

Estas son obritas muy agradables de escuchar, con ese ritmo y ese desenfado tan de Gershwin.

jueves, 6 de mayo de 2021

Día #113

 


 

«Deseo mostrar al mundo, tanto como pueda en esta profesión musical, la errónea vanidad de que sólo los hombres poseen los dones del arte y el intelecto, y de que estos dones nunca son dados a las mujeres»

 

Eso decía Maddalena Casulana en la dedicatoria, dirigida a Isabel de Médicis, de su primer libro de madrigales, publicado en Venecia en 1568.

 

Esta compositora, laudista y cantante italiana trabajó entre 1544 y 1590. Su estilo pertenece al Renacimiento tardío. Fue la primera compositora occidental que vio publicada su obra.

 

Eso he escuchado hoy. Y eso que no es nada fácil. ¿Compositora… y de música antigua?

 

Pero para eso está Spotify, para localizar piezas suyas dispersas por diversos discos.

 

Así descubro que «Morir non puè il mio cuore» es el más popular.


Ilustro esta entrada con una obra de Artemisia Gentileschi, «Santa Cecilia tocando el laúd», pintada no se sabe si h. 1610-1612 o más bien 1620. No sé por qué en Wikicommons aparece como retrato de Maddalena Casulana, cuando se supone que la compositora habría muerto aproximadamente en 1590.


domingo, 2 de mayo de 2021

#100 Enrique V

 

Póster en FilmAffinity



 


Henry V

Año: 1989

País: Reino Unido

Dirección: Kenneth Brannagh

Música: Patrick Doyle

 

Una de mis películas favoritas ever.

 

Cuando vi esta película por primera vez, allá a finales de los 80, principios de los 90, me dejó absolutamente apabullada.

Se basa en una obra de Shakespeare, Enrique V (1599) que cuenta la invasión de Francia por Enrique V, la batalla de Agincourt, y como coda final el matrimonio con la hija del rey gabacho.

Me dejó enamorada, por supuesto, la palabra, la maravillosa palabra de Shakespeare, declamada de manera muy natural por Kenneth Brannagh y unos cuantos actores absolutamente increíbles, desde Derek Jacobi a Paul Scofield, pasando por dame Judi Dench, Ian Holm, o un jovencísimo Christian Bale. Y claro, Emma Thompson, of course.

Pero ese teatro isabelino se narra de manera totalmente cinematográfica, con esa música increíble de Patrick Doyle, esos movimientos de cámara y el trávelin, por supuesto.

Una vez leí en una crítica que este es el Enrique V posterior a la guerra de Vietnam. Ya no puedes contar la guerra patriótica como hizo Lawrence Olivier en su Enrique V de 1944, con preciosas imágenes que recuerdan al gótico internacional.

Aquí la guerra es sucia, con rostros embrutecidos y sudorosos, con sangre y barro, escenas trágicas como ese inolvidable trávelin de Kenneth Brannagh cargando con el paje asesinado mientras suena el Non nobis de Patrick Doyle.



Con esta película descubrí lo mucho que me gustaban las películas basadas en historias shakespearianas, Kenneth Brannagh se convirtió en uno de mis directores favoritos y me he visto todas sus pelis, siempre tienen algo especial; por supuesto, me encantó Emma Thompson, y la música de Patrick Doyle. 

La vi una y otra vez, pues la tenía grabada en VHS, ¿podéis creerlo? Aún debo tenerla por ahí, y eso que ya no tengo reproductor de vídeo. Ahora la veo cada pocos años, la última, gracias a la plataforma digital a la que estoy suscrita.

Me aprendí de memoria muchas escenas, incluido el discurso del día de san Crispín.

We happy few

We band of brothers



Hasta creo que me ayudó a aprobar el Proficiency, allá en los años noventa. Saberte unos cuantos versos de Shakespeare de memoria te da mucha seguridad.

Tuvo muchas nominaciones a los Óscar, pero solo ganó el de mejor diseño de vestuario (Phyllis Dalton). Fue el año de Paseando a Miss Daisy, película que creo que no llegué a ver, por no interesarme gran cosa. Dos de mis chicos favoritos ganaron el Óscar: Daniel Day-Lewis (actor principal) y Denzel Washington (de reparto). Por cierto que Denzel trabajó con Brannagh años después, en la deliciosa comedia Much ado about nothing (Mucho ruido y pocas nueces, 1993, hilarante, de verdad.

También es el año en que ganó Cinema Paradiso en la categoría de internacional.

Ganó el BAFTA al mejor director, el premio del Círculo de Críticos de Nueva York al mejor director novel, el de la Asociación de Críticos de Chicago a la mejor película extranjera y, en los Premios del Cine Europeo, Kenneth Brannagh fue escogido mejor director y actor.

Es una de mis películas favoritas y por eso no podía faltar aquí, en mi lista de cien. La he visto hace menos de un mes y hablar de ella hace que me entren ganas de volver a verla.

Dicen que quedas marcado por las cosas de cuando tenías veinte años. En mi caso, el evento decisivo sería, entonces, la caída del muro de Berlín. Pero también aquellas películas que vi por entonces, son las que me formaron el gusto; entre ellas, este Enrique V

Gracias, Kenneth, por existir y realizar tu sueño.

Para saber más: consúltese la Wikipedia, FilmAffinity o la Internet Movie Data Base.

sábado, 1 de mayo de 2021

Día #108

 


 

«Gracias a vosotros» (2012-2013), disco de dúos de María Dolores Pradera. Un día de nostalgia.