Anne of Green Gables
Autor: Lucy Maud Montgomery
Año: 1908
Género: Novela
Edad: juvenil
La niña imaginaria más encantadora que se haya creado
Ana la de Tejas Verdes, Anne la de Tejados Verdes o Ana de las Tejas Verdes es un clásico
de la literatura juvenil en mi edición de Toromítico te ponen una cita de Mark
Twain:
Desde la inmortal Alicia, Ana, la de Tejas Verdes, es la niña imaginaria
más encantadora que se haya creado.
Lo menciono porque
me gusta la parte de «niña imaginaria encantadora». Lo que no me convence es la
comparación con Alicia, porque para mí son novelas que no tienen nada que ver la una con la otra.
Alicia personifica el sueño de un varón sobre una niña imaginaria
idealizada. Ella no es realmente el centro de la historia, sino excusa para el
ingenio del autor en juegos de palabras y de lógica. Y, en tercer lugar, te mira
a esta niña con la perspectiva masculina.
En cambio, en Ana nos
encontramos una niña auténtica de carne y hueso, uno de esos personajes que te
imaginas que ha podido existir en algún sitio. Tiene personalidad, protagoniza
su propia historia, y las cosas que le ocurren son las coherentes con su
carácter.
Se supone
ambientado Isla del Príncipe Eduardo a principios del siglo XX. Vemos a una
pareja de hermanos, Matthew y Marilla Cuthbert, ya de cierta edad. Tienen una
granja y quieren adoptar a un niño huérfano para que ayude en las tareas. Imaginaos la sorpresa de Matthew cuando, al ir a la estación, descubre a una niña flacucha,
pelirroja y con pecas. Esta huérfana de 11 años
no les va a servir de mucha ayuda en su explotación agraria.
Aceptan a la niña
un poco regañadientes, pero luego ocupará todo su corazón. En el caso de
Matthew, un hombre muy tímido, desde el principio; en cambio Marilla, la
hermana, tarda más porque es una señora seca no muy dada a expresar sus
emociones y mucho menos el cariño. Tiene unas ideas claras de lo que está bien
y lo que está mal. Es práctica, y abomina de todo aquello que no sea útil. Así
que no hay sitio en su vida para las cosas superfluas que sean bonitas simplemente
porque sí.
En cambio Ana es
una niña todo imaginación. Se exalta por cualquier cosa, una lectura, un
paisaje, una foto... y es bastante charlatana. Todo lo que piensa y lo que
siente lo tiene que expresar, y recurre a palabras altisonante. A ella todo lo
que le ha emociona.
Su vara de medir la vida es si algo es romántico o no. Cuando
conoce a alguien se pregunta si será su alma gemela o no.
A través de Ana conoceremos a personajes
secundarios, cada uno con su carácter peculiar, que se te quedan grabados: su mejor
amiga Diana o Gilbert Blythe, el chico que se convertirá en su enemigo y más tarde en la serie, su novio y su marido.
Y este odio empieza porque él le dijo que tenía el pelo de zanahoria (algo que horroriza a la propia
Ana, que odia su aspecto porque no encaja con su ideal de belleza romántica).
No
obstante, a lo largo del libro te das cuenta de que en realidad Ana le gusta
mucho a Gilbert, y que no acierta a que ella se reconcilie con él.
Luego
tenemos a la señora Linde, típica vieja del visillo cotilla y moralista que de
todo sabe y de todo opina, tiene que estar siempre expresando sus ideas sobre lo
que la gente hace y suele ser bastante negativa.
Suelo decir hay
veces que el paisaje es un personaje más de la novela. En este caso,
es la desolada isla nórdica del Príncipe Eduardo: el campo, la laguna, la costa,
los pinos... Pero no solo tal como es, sino cómo lo reinterpreta Ana: una laguna vulgar
se convierte en la Laguna de las Aguas Refulgentes, un caminito entre arces se
convierte en el Sendero de los Amantes.
Este poner nombres fantasiosos a
accidentes topográficos perfectamente anodinos supone una apropiación del
paisaje y su transformación, intelectualmente, en algo propio.
Este clásico lo descubrí
gracias a una serie de televisión que echaron hace muchos, pero muchos, años.
Es la canadiense de 1985, protagonizada por Megan Follows y Jonathan Crombie,
con una estupenda Coleen Dewhurst como Marilla Cuthbert.
Os dejo esta foto, que he encontrado en el blog Inviernos de 1882, muy recomendable y que, como me ocurrió a mi, descubrió esta historia gracias a la serie de los ochenta.
Me encantó por las
aventuras, y esa relación amor-odio con Gilbert.
Luego, unas décadas después, cuando Toromítico sacó las novelas, las compartí con gente de edad apropiada y también le gustaron.
Sobre todo, atrae esa forma de ser tan personal de Ana (Anne con E), esa forma
tan extrema de ver el mundo, que en nada pasa de las alegrías infinitas a los abismos
de la desesperación, y acabará tranquilizándose, conociendo su lugar en el
mundo.
Realmente es un
libro que merece la pena. Aquí comento solo el primer de la serie, con Ana de 11 a 16 años, y,
en su relación con Gilbert, llega al momento en que se reconcilian y deciden ser
amigos.
Actualmente se
considera un libro juvenil, recomendable para niños y niñas en torno a los doce
años de edad.
A pesar de ello, se escribió para adultos, por lo que no es de
extrañar que también podamos disfrutarla, pues es una historia que no pierde el tiempo en inutilidades. Las peripecias de la niña
se van sucediendo sin respiro. Cuando a Ana se le va la olla arrastrada por su
imaginación, no falta el contrapunto la frase irónica, seca, de Marilla, la sensatez
personificada, lo cual te hace sonreír
inevitablemente.
Como he indicado
antes, este es el primero de una serie de novelas sobre Ana Shirley, que os
enumero a continuación, siguiendo la wikipedia en inglés:
1. Ana, la de
Tejas Verdes (Anne of Green Gables, 1908). Ambientada en 1876-1881, Ana
tiene 11 a 16 años.
2. Ana, la de
Avonlea (Anne of Avonlea, 1909). 1881-1883, 16 a 18 años.
3. Ana, la de la
Isla (Anne of the Island, 1915). 1883-1887, 18-22 años.
4. Ana, la de
Álamos Ventosos (Anne of Windy Poplars en Canadá y EE.
UU.; Anne of Windy Willows en el
Reino Unido y Australia, 1936). 1887-1890, 22-25 años.
5. Ana y la Casa
de sus Sueños (Anne’s House of Dreams, 1917). 1890-1892, 25-27
años.
6. Ana, la de
Ingleside (Anne of Ingleside, 1939). 1899-1905, 34-40 años.
Escribió también
libros que se centran en los hijos de Ana, aunque el personaje también aparece:
7. El valle del
Arco iris (Rainbow Valley, 1919). 1906-1908, 41-43 años.
8. Rilla, la de Ingleside (Rilla of Ingleside, 1921) 1914-1918,
49-53 años.
9. The Blythes are Quoted (2009) 1905-1940, 40-75
años. Es un libro terminado por L. M. Montgomery (1874–1942) cerca del final de
su vida, pero no publicado íntegramente hasta 2009.
Por si no quedaba claro, os cuento que, en mi opinión, es uno de esos libros que no te defraudan si les das una oportunidad.