La Flagellazione
Fecha: 1459-60
Estilo: Arte renacentista
Autor: Piero della Francesca
Técnica: temple sobre tabla
Ubicación: Galería de Las Marcas (Urbino,
Las Marcas, Italia)
Cuando las cosas se ignoran, campo libre
a la elucubración
Ya he comentado que uso trucos para distinguir los pintores de la primera
generación renacentista. Piero della Francesca sería el «pintor matemático», por su estudio científico de la perspectiva lineal.
Esta tabla, tan pulidita ella, se incluye entre las obras maestras de la Italia del siglo XV. Actualmente se conserva
en la Galería Nacional de Las Marcas, en Urbino.
Es
una pintura más bien pequeña, dentro de lo que es el arte renacentista, que tenía más a lo monumental: 67,5 × 91 cm.
Como se ve, hay dos partes. A
un lado, flagelan a un hombre atado a una columna, sobre la que
hay una estatuilla dorada de estilo clásico.
A
la izquierda, sobre un trono está sentado alguien vestido con púrpura imperial
y con un sombrero típico de los emperadores bizantinos de la época. Otra
figura, con un turbante de inspiración oriental, da la espalda al espectador.
Esta
escena se enmarca en una arquitectura clásica, con columnas y un suelo ajedrezado, con un obvio esfuerzo en representar con perspectiva lineal la escena. Esta parte del cuadro está iluminada desde arriba, a la derecha, como se ve en el torso
del hombre azotado.
Al otro lado hay tres figuras en pie, en primer plano. Uno viste un sombrero
oscuro, también de inspiración oriental. En medio, un joven rubio, coronado de
laurel y descalzo, va de rojo. A la derecha, un hombre mayor, con una
vestimenta bordada de oro sobre azul, con signos que asemeja la típica de un
astrólogo.
Este
trío tiene otra iluminación, contrapuesta a la de la escena de la flagelación,
pues aquí la luz viene desde la izquierda, como se ve en el rostro del
personaje de la izquierda.
Es
un cuadro de colores claros, luminosos, no muy variados, rojos y blancos. Las
arquitecturas se representan de una manera muy exacta, y demuestra el conocimiento que tenía Piero de la arquitectura clásica y renacentista de la época, pensemos en un León Battista Alberti.
En este cuadro, sobresale
el estudio de la perspectiva. Además, adopta un punto de fuga original: normalmente se coloca en el
sitio más importante. Si estamos ante una flagelación de Cristo, lo lógico es
que se situara en la cabeza de este, como lugar más importante del cuadro.
Sin
embargo, aquí lo traslada a la derecha de la figura
azotada, más bien abajo del soldado que viste de verde. Este recurso le sirve para «acercar» la escena de flagelación al trío del primer plano.
A
pesar de que se representa un hecho violento, una flagelación, el aspecto
general es frío, tranquilo, con una cierta calma. Esto se logra por los colores
que elige, así como por esa iluminación, refulgente pero gélida, casi como de
fluorescente. También en las expresiones neutras de los personajes. El trío de la derecha
está como aislado, apartado, indiferente a lo que ocurre a un lado. Tampoco
están implicados el uno con el otro, no transmiten ninguna emoción.
¿Qué representa?
Como
no se sabe exactamente qué representa, esto ha dado lugar a diversas
interpretaciones. No voy a entrar en detalles, porque los podéis leer en el artículo de la Wikipedia.
Os cuento la clásica: la flagelación de Cristo. Según esto, sería Poncio Pilatos
el personaje sentado en el trono sobre el patio enlosado y Herodes Antipas
quien está de espaldas. La escena se desarrollaría en el palacio de Pilato en
Jerusalén.
En cuanto a quiénes son los personajes de la derecha, ni siquiera hay una sola interpretación tradicional. Una es que el personaje rubio sería Oddantonio II de Montefeltro, el
duque de Urbino antecesor de Federico, asesinado en 1444, flanqueado o bien por
sus asesores, a quienes se echaba la culpa del asesinato por su negligencia, o
bien por sus asesinos, dos ciudadanos de Urbino. También se ha identificado
la figura de la izquierda como Ottaviano Ubaldini, astrólogo de Luis III
Gonzaga, marqués de Mantua (1412-78) que sería el personaje retratado a la
derecha.
Pero
también era clásico interpretar el trío como una representación alegórica de la
iglesia latina (católica) y la griega (ortodoxa) separados por un ángel. Se trataría
así de reflejar un tema por entonces de mucha actualidad, el cisma de Oriente, que
se intentó superar a través del Concilio de Ferrara/Mantua/Florencia.
Y
es que para estos cuadros antiguos, muchas veces hay que ver no sólo lo que hay
en el cuadro, sino también los posibles significados ocultos. Es lo que dicen la iconografía, inagotable. Así, por ejemplo,
se ven como símbolos de la gloria divina cosas como el laurel que rodea la
cabeza del muchacho rubio, o la estatua dorada en lo alto de la columna.
Historia del cuadro
No
se sabe cuándo se encargó, ni para quién. Posiblemente sea un encargo del duque
Federico de Montefeltro. La mención más antigua y tradicional procede de un
inventario de la catedral de Urbino, donde estaba en 1744; allí estaba, en la
sacristía de la catedral, hasta que entró en la Galería en el año 1915.
Este
cuadro, como por lo general los de Piero della Francesca, es difícil de datar. En
cuanto a la datación, se han propuesto fechas que van desde 1444 hasta 1472. Por
ejemplo, si cojo alguno de los libros de arte que tengo por casa, puedo leer
como datación: ¿h. 1460?, h. 1447-1449,
¿h. 1455?, posterior a 1459, c. 1450-1460. Para que veáis el desconcierto. Yo
he puesto arriba la que dan en la página web de la Galería de Las Marcas.
Sí
que se asume con certeza la autoría, pues hay una inscripción con la firma del
autor, a la izquierda bajo el trono: Opus
Petri de Burgo S[an]c[t]i Sepulcri. Es decir, obra de Pedro de Burgo S[an] Sepulcro.
El
autor: Piero della Francesca
Piero
della Francesca nació como Piero di
Benedetto en Sansepolcro, cerca de Arezzo, hacia el año 1416. Terminó su
formación en Florencia, donde fue discípulo de Fra Angélico, aunque era
bastante distinto de su maestro, y allí empezó su carrera artística. Pero luego
volvió a su región de procedencia, trabajando en lugares como Arezzo, Rímini o
Sansepolcro. Es uno de los cuatrocentistas que más se movió. Entró a trabajar para Federico de Montefeltro, duque de Urbino. Murió
en 1492.
Representa el momento cumbre de una línea de investigación que
siguieron algunos pintores del siglo XV: el estudio de la perspectiva de una manera científica,
partiendo del estudio de la matemática y la geometría. Otros pintores que se
interesaron por estos temas fueron Paolo Uccello y Andrea del Castagno.
Se
le considera como uno de los maestros del primer renacimiento italiano. Podría
decirse que Piero es el ejemplo perfecto del triunfo de la perspectiva lineal
en el siglo XV, fusionando conocimientos de matemáticas con los pictóricos.
Su
estudio de la técnica es muy preciso, intelectual. Se le llega a considerar,
por eso, no solo como artista, sino también como matemático. Llegó a escribir un
tratado sobre perspectiva: De prospectiva
pingendi, cuyo texto entregó a Federico de Montefeltro en el año 1474.
Otras
obras
Creo que La flagelación de Cristo puede considerarse como la obra más conocida de Piero della Francesca, aunque hay otros cuadros
suyos que suelen aparecer en los libros de Historia del Arte. Voy a usar los
datos que aparecen en la Wikipedia en español, con todas las dudas que se
plantea en cuanto a su datación.
Ante todo, su obra maestra: los frescos que ejecutó en Arezzo, con la
historia de la Santa Cruz. Son composiciones claras, matemáticas, con un uso
expresivo de la luz y del color. Destaca una imagen que se considera de los
primeros cuadro nocturnos de
Occidente, en los que se ve la maestría del autor en el uso de la luz, para
sobrado, él:
«El
sueño de Constantino», detalle del ciclo de frescos de la Leyenda de la santa Cruz en el coro de la basílica de San Francisco
de Arezzo (1452-1466). 329 × 190 cm, una de las primeras escenas nocturnas del
arte occidental.
«Batalla
de Cosroes », detalle del ciclo de frescos de la Leyenda de la santa Cruz (1452-59). 390 × 747 cm. Basílica de San Francisco,
Arezzo.
«Santa
Elena halla la Vera Cruz», detalle del ciclo de frescos de la Leyenda de la santa Cruz (1452-66). 356
× 747 cm. Capilla Bacci en la Basílica de San Francisco, Arezzo.
Pongo
a continuación otras obras conocidas de Piero.
El bautismo de Cristo (h. 1450). Temple sobre tabla, 167 × 116
cm. National Gallery (Londres, Reino Unido).
La resurrección de Cristo (1463-65). Fresco y témpera, 225 × 200
cm. Museo Cívico de Sansepolcro (Sansepolcro, Italia)
Virgen de Senigallia (1470-85). Óleo sobre papel llevado a
tabla, 61 × 53,5 cm. Galería Nacional de las Marcas (Urbino, Italia)
Retrato de los duques de Urbino Federico
de Montefeltro y Battista Sforza
(1472). Temple sobre tabla, 47 × 33 cm. Galería de los Uffizi (Florencia,
Italia). Este desde luego es uno de los cuadros más célebres, el de su mecenas y señora. Están representados de perfil a modo de las medallas antiguas.
Virgen con el Niño y Santos, con
Federico de Montefeltro (1472-74).
Temple sobre tabla, 251 × 173 cm. Pinacoteca de Brera (Milán, Italia).
Uno de esos pintores destacados del renacimiento italiano, en su primera fase, de esos que bien merece la pena que visites en un viajecito a Italia, la zona de Las Marcas. Hay que tener cierta esperanza y vamos a pensar en posibles viajes a Urbino y sus alrededores. Tiene playa y montaña, así que para mí, estupendo. Algún día...